Quiénes somos
En Viento de Agave, creemos que el mezcal no se fabrica: se hereda.
Nuestra historia comienza en las montañas de Oaxaca, donde el viento recorre los valles y acaricia los campos de agave como lo ha hecho por siglos.
Somos una familia de agricultores y maestros mezcaleros que, generación tras generación, ha aprendido a escuchar la tierra. No seguimos una receta, seguimos los ritmos de la naturaleza: el tiempo del agave, la fuerza del fuego, y la voz del viento.
Creamos mezcal como se cuentan las buenas historias: con paciencia, con emoción y con respeto por quienes vinieron antes.

